Luis Oliver Albesa y su equipo desaparecieron del mapa y dejaron a César Traversone, director deportivo, como única cabeza visible del club. El club se hundió económicamente con Luis Oliver Albesa: no había dinero para pagar a los jugadores, que estuvieron muchísimos meses sin cobrar, las oficinas se quedaron incluso sin línea telefónica, el caos era absoluto. El Cartagonova estaba condenado a desaparecer, la deuda era astronómica. La temporada fue muy movida: José Murcia fue destituido como técnico antes del primer partido de liga, Manuel Palomeque y Juan Señor intentaron llevar al equipo a lo más alto hasta que empezaron los problemas económicos.